La actual interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, se presentará esta semana en Comodo Py para pedir que se profundice la investigación sobre la instalación de cámaras y mircófonos en las celdas de la cárcel de Ezeiza. El material habría sido colocado por miembros de la Policía de la Ciudad para espiar a empresarios, sindicalistas y dirigentes políticos.

La funcionaria irá a ver al juz Marcelo Martínez de Giorgi. Es que, sólo de las escuchas en los teléfonos públicos, la AFI reogrió 105 mil audios.

Además, según pudo cosignar Página 12, a diferencia de lo que ocurrió en la sede porteña del Banco Provincia de Buenos Aires, en el penal de Ezeiza el cableado también lo hizo la AFI, pero los encargados fueron miembros de la Policía de la Ciudad.

Sin embargo, los técnicos no figuraban como personal de la AFI, sino que estaban “en comisión” en la central de espías. Las cámaras y micrófonos se instalaron en las celdas, en los lugares de reunión y hasta en los salones en que los detenidos se reunían con sus abogados y familias

Según explicaron, las escuchas se hicieron con la excusa de monitorear al Mario Segovia. Sin embargo, la intervención abarcó a otros pabellones. Además, luego se hizo lo mismo con otra causa puesta en marcha a raíz de una agresión del Pata Medina al empresario Fabián De Sousa.

Se cree que este expediente fue el falso motivo para cablear más celdas y hacia allí fueron los técnicos de la Policía de la Ciudad, pasados en comisión a la AFI.