Luego de la escandalosa revelación de un exministro británico que contó que el exvicecanciller macrista Carlos Foradori estaba totalmente borracho cuando se firmó en 2016 el acuerdo que permitió las operaciones comerciales y vuelos hacia las Islas Malvinas y limitó el histórico reclamo por soberanía, piden investigar la responsabilidad del expresidente Mauricio Macri y buscan reactivar una denuncia de hace tres años por la firma del pacto.

La revelación salió a la luz este martes, tras la publicación de un libro donde el exministro de Relaciones Exteriores del Reino Unido, Alan Duncan, aseguró que Foradori firmó “borracho” el acuerdo que habilitó operaciones comerciales y aeronáuticas en las Malvinas y en el mar argentino que las rodea, en lo que se conoció como el pacto Foradori – Duncan.

Aquel acuerdo firmado en 2016 durante el Gobierno de Macri y muy repudiado por organismos de Derechos Humanos y excombatientes argentinos fue motivo de una denuncia por traición a la patria contra el expresidente y una decena de funcionarios macristas.

La denuncia por el pacto Foradori - Duncan

Según la denuncia, presentada en 2019 por la abogada Valeria Carreras e fue impulsada por el fallecido fiscal Jorge Di Lello, el pacto cedió “a la potencia usurpadora Reino Unido no sólo los recursos como exploración y explotación de hidrocarburos y vuelos del continente a Malvinas, sino que se coloca a la potencia en absoluta ventaja estratégica”.

Di Lello había imputado no sólo a Macri, sino también a otros funcionarios como los exministros Guillermo Dietrich y Juan José Aranguren; el excanciller Jorge Faurie y el secretario de Energía, Gustavo Lopetegui.

Ahora, Carreras amplió la denuncia contra Macri por el acuerdo Foradori – Duncan con un escrito en el que adjuntó las declaraciones de Duncan sobre la conversación que mantuvo con Foradori en 2016, donde el entonces vicecanciller argentino le transmitió a su par británico que “estaba tan borracho” cuando firmó el pacto que “no podía recordar los detalles del documento”.

“El ministro argentino ‘estaba borracho’ cuando acordó el polémico acuerdo sobre Malvinas con el Reino Unido”, reveló el portal británico Declassified UK.

Según la presentación judicial, a la que accedió AM750 y Página/12, el pacto Foradori Duncan “fue el resutlado de una política de Estado del entonces presidente Macri, en conteste con los pedidos del Reino Unido a través de Theresa May”. “Las declaraciones son de extrema gravedad, pero relacionada con el objeto de la denuncia, que es la cesión de recursos soberanos y espacio aéreo”.

En la misma ampliación de la denuncia, además, Carreras pidió el inmediato llamado a declaración judicial a Foradori, así como también a Duncan.

La denuncia original por el pacto Foradori – Duncan

En la denuncia de 2019, la abogada apuntaba a que tras el acuerdo se avanzó en licitaciones y adjudicaciones de áreas del Atlántico Sur a empresas británicas, la concesión de vuelos directos hacia Malvinas y de permisos de pesca y explotación del territorio marítimo en el Atlántico Sur.

Además, afirman que violaría disposiciones de la Constitución argentina que ratifican la soberanía legítima e imprescriptible sobre las Islas Malvinas. Y que, como si fuera poco, el pacto no pasó por el Congreso.

Qué fue el pacto Foradori – Duncan

Con aquel acuerdo, los británicos impusieron condiciones como "remover todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de las Islas Malvinas".

Entre estos elementos incluyeron "comercio, pesca, navegación e hidrocarburos".

Esto dio vía libre para acrecentar los negocios en las islas. Así, en 2019 se realizó una licitación off shore para la exploración y explotación de los hidrocarburos en Mar Argentino.

Con el acuerdo, por el que Foradori tuvo que dar explicaciones en el Congreso, el Reino Unido impuso más vuelos desde el continente a Malvinas. Y una nueva ruta, San Pablo – Malvinas, con una escala en Córdoba.

Es decir, el indecoroso acuerdo implicaba reconocer y consolidar el colonialismo británico en el archipiélago.

Ante el Congreso, Foradori tuvo que salir a explicar, entre un unánime repudio, que "cada uno de los funcionarios de la Cancillería y del Gobierno, por supuesto, tenían la camiseta argentina puesta".

El exvicecanciller argentino consideró que lo que lanzó junto a su contraparte británica fue “un comunicado de prensa conjunto” sin firmas. Y que no se trataba de un acuerdo.

Sin embargo, el argumento encrespó los ánimos opositores que le preguntaron cómo denominaría los diez puntos en los que allí se acuerda avanzar. “Según la Convención de Viena, lo firmado es un acuerdo”, intervino Alejandro Grandinetti, del Frente Renovador.