Según Unicef, casi dos tercios de los niños de Ucrania debieron abandonar sus hogares en las seis semanas que van de la invasión rusa. El director de programas de emergencia de la agencia, Manuel Fontaine, dijo que es “increíble” que 4,8 millones de los 7,5 millones de niños ucranianos hayan sido desplazados en tan poco tiempo. 

Fontaine añadió que es algo que nunca antes había visto que ocurriera tan rápido en sus 31 años de labor humanitaria. “Se han visto obligados a dejar todo atrás: sus casas, sus escuelas y, a menudo, a sus familiares”, dijo al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

“He escuchado historias de las medidas desesperadas que están tomando los padres para poner a sus hijos a salvo, y de niños tristes por no poder volver a la escuela”, agregó, en declaraciones reproducidas por la agencia AFP.

El funcionario señaló que 2,8 millones de los niños ucranianos han sido desplazados dentro del país y otros 2 millones ya se encuentran en otras naciones. Al mismo tiempo, agregó, casi la mitad de los cerca de 3,2 millones de niños ucranianos que siguen en sus casas “podrían estar en riesgo de no tener comida suficiente”.

Cierre de las Escuelas

Fontaine declaró que el cierre de escuelas en Ucrania afecta la educación de 5,7 millones de niños pequeños y de 1,5 millones de estudiantes de educación superior.

“Cientos de escuelas e instalaciones educativas han sido atacadas o utilizadas con fines militares, y otras sirven como refugios para civiles", aseveró.