Por primera vez, la Corte Interamericana de Derechos Humanos escuchará a una joven que fue víctima en su adolescencia de violaciones reiteradas. Fue abusada en reiteradas ocasiones a sus quince años por un primo adulto, que la duplicaba en edad. Sin embargo, se le negó el acceso a justicia cuando denunció el hecho en su país.

Se trata del caso caratulado como “Brisa De Angulo Losada contra Bolivia”. Las audiencias desde icónico heho están convocadas para este martes y miércoles y se harán de manera virtual.

En diálogo con Página 12, Brisa de Angulo aseguró que su gran sueño con esta demanda "es lograr una serie de reformas judiciales" sobre las que vienen trabajando. Que se pueda "enriquecer a los diferentes sistemas judiciales en la región, no solamente a Bolivia, sino también a los otros países".

Para la denunciante, esta posibilidad "permitiría que gran cantidad de niñas y niños que están siendo víctimas de violencia sexual se sientan con más confianza para romper los silencios". Paso fundamental para poder "denunciar, y buscar el camino de acceso a la justicia".

Una Justicia que no ve

Según surge del expediente, Brisa soportó tres procesos penales en Bolivia, pero no obtuvo justicia en ninguno de ellos. 

Su agresor está libre, actualmente no vive en Bolivia y nunca estuvo preso. Por eso la joven llevó su reclamo a instancias internacionales.

En 2017, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos emitió recomendaciones a favor de Brisa y reconoció que, al no proporcionar soluciones efectivas, Bolivia había violado sus derechos humanos.

La problemática del incesto

Además, el caso de Brisa en particular pone en primer plano el extendido problema del incesto en la región. Y los obstáculos que enfrentan quienes han sufrido abusos intrafamiliares para denunciarlos y llegar a una condena.

Así lo explicó la propia De Angulo: "La mayoría de la violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes se comete por adultos dentro del mismo núcleo de la familia. Esto realmente se llama ‘violación incestuosa’". 

"La cultura del incesto es una serie de valores, prácticas, normas y mitos que enfatizan cosas como la importancia de la lealtad a la familia. La importancia de los secretos familiares, la importancia de no confrontar. Especialmente a los varones", añadió.

Y dijo: "Afortunadamente, todas las personas que me conocían en mi vida social siempre han sido extremadamente solidarias conmigo. Gracias a ellos y a la decisión valiente mi papá y mamá de no dejarse entrampar por la familia ampliada, estoy donde estoy".

El primer centro para sobrevivientes de abuso

Brisa de Angulo fundó, a los 17 años, el primer centro en Bolivia para la atención integral de niñas y niños sobrevivientes de abuso. Se llama "Una brisa de esperanza".

"Cuando empezamos con el programa, la tasa de condenas era de 0,02 por ciento. Ahora logramos un 95 por ciento de fallos condenatorios", destacó.

Sin embargo, no es todo positivo. Su trabajo la hizo ser víctima de constantes amenazas. Por eso tuvo que mudarse de país y prefiere no decir dónde vive. Hoy tiene 36 años y se convirtió en activista contra la violencia sexual en Bolivia.

Un mensaje de apoyo a Thelma Fardón

Brisa, además, en el mismo reportaje le envió un mensaje a Thelma Fardin, que está intentando avanzar, junto a su equipo, en una denuncia contra el actor Juan Darthes por abuso sexual cuando ella era menor de edad.

"Quiero que sepa que puede contar conmigo en lo que pueda ayudarle, que cada día somos más las que claramente decimos a los agresores y a los potenciales agresores que ni una más va a quedar sola, luego de haber recibido una agresión sexual", señaló.

*Si vos o alguien que conocés sufre violencia de género podés llamar al 144, para recibir asistencia y contención, en caso de emergencia al 911.