El primer ministro británico, Boris Johnson, responsabilizó a Rusia por amenazar directamente la seguridad de toda Europa, después de que un incendio en la mayor planta nuclear de Europa -y de cuyo origen Rusia y Ucrania se acusan mutuamente- pusiera en vilo durante varias horas al mundo entero.

El premier dijo que el Reino Unido haría todo lo posible para garantizar que la situación no se deteriore aún más y que buscará una reunión de emergencia "inmediata" del Consejo de Seguridad de la ONU. En las primeras horas de la mañana Johnson habló con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski sobre la situación gravemente preocupante en la central nuclear de Zaporiyia.

Ambos líderes acordaron que Rusia debe cesar de inmediato sus ataques en zonas cercanas a la central nuclear y permitir el acceso sin restricciones a la planta de los servicios de emergencia y acordaron que un alto el fuego era crucial, informó un portavoz del Gobierno británico.

El Gobierno ruso, no obstante, dijo hoy que el incendio fue provocado por Ucrania. Mientras tanto, los ministros de Relaciones Exteriores occidentales se reunirán en Bruselas para evaluar una respuesta a la guerra en Ucrania y considerar qué más se puede hacer para obligar a Rusia a que cese su acción invasora.

Se espera que los ministros busquen nuevas formas de apoyar a Ucrania mientras mantienen la presión sobre Rusia.

La ministra de Relaciones Exteriores del Reino Unido, Liz Truss, dijo que las conversaciones de hoy estaban diseñadas para señalar un fuerte apoyo a Ucrania mientras se endurecía lo que ella llamó "la máquina de guerra de Putin".