La ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad Elizabeth Gómez Alcorta recordó el femicidio de Úrsula Bahillo en su primer aniversario y aseguró que el caso de la joven de 18 años asesinada por su expareja "dejó en evidencia los enormes errores que cometió el Poder Judicial y la Policía".

La funcionaria sostuvo por AM750 que estas malas actuaciones "aumentaron enormemente el riesgo del femicidio de Úrsula". "El femicida, que era un miembro de la Bonaerense, tenía otras denuncias respecto de otros hechos. Había sido denunciado tres veces por la propia Úrsula", recordó.

"Esas pésimas intervenciones aumentaron el riesgo de un resultado trágico. Después de este hecho, el próximo ocho de marzo las consignas estaban destinadas a interpelar al Poder Judicial para que no suceda nunca más una mala intervención del Estado", agregó.

Luego, Gómez Alcorta criticó que estos errores de la Justicia tienen lugar "cuando lo que tiene que hacer es acompañar y asistir a quien está atravesando una situación de violencia de género".

"No tengo consuelo", dijo la madre de Úrsula Bahillo

"No puedo creer que pasó un año de este evitable femicidio. Parece que fue ayer. Es un abrir y cerrar de ojos y una sigue sangrando. No tengo consuelo, sí mucho dolor. Con 53 años siento que me estoy secando en vida", dijo a Página/12 Patricia Nasutti, mamá de Úrsula Bahillo.

A un año del hecho se realizarán en la plaza San Martín de esa localidad "una juntada de mamás y papás del dolor" y una misa. Los padres de Úrsula piden ahora la destitución de dos jueces y responsabilizan a la Municipalidad y el personal de Seguridad local por el crimen. "A mi hija me la mató el sistema. Fue un femicidio que era evitable", agregó en diálogo con otro medio.

Cómo fue el femicidio de Úrsula Bahillo

Úrsula Bahillo fue hallada asesinada a puñaladas el lunes 8 de febrero de 2021, cerca de las 20.30, entre unos pastizales en un campo a 13 kilómetros de Rojas, en el noroeste de la provincia de Buenos Aires.

En ese mismo lugar la policía apresó a Martínez herido, quien tras el crimen se clavó el cuchillo en el abdomen.

El femicidio se descubrió por un llamado al 911 de un tío del imputado, quien refirió que creía que su sobrino le confesó que "se había mandado una cagada". 

Úrsula había denunciado en varias oportunidades a su exnovio por amenazas y violencia de género.

El expolicía tenía una medida de restricción perimetral que había violado dos días antes del femicidio y tras el crimen se conocieron mensajes de whatsapp que la chica había intercambiado con amigas, en los que les contaba que "tenía miedo", ya que su expareja la tenía "amenazada de muerte".

*Si vos o alguien que conocés sufre violencia de género podés llamar al 144, para recibir asistencia y contención, en caso de emergencia al 911.