El empresario de tecnología agrícola y CEO de Syngenta, Antonio Aracre, respaldó este miércoles el principio de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Señaló que lo negociado "genera expectativa", por la meta fiscal, y "despeja incertidumbres", en tanto a la utilización de dólares para la producción.

"Siempre hay que comparar algo que se logra, algo que se decide, con la alternativa", comenzó expresando Aracre en declaraciones a AM750. De este modo, el empresario consideró necesario matizar las críticas al FMI con lo que significaría haber entrado en cesación de pagos.

"Sería bueno explicarle a la gente cuál es la alternativa a la frustración que nos genera un acuerdo con el Fondo. Si para la gente más vulnerable hubiese sido mejor la alternativa. Creo que ahí está la cuestión", señaló en esta dirección.

Y comentó: "No soy de los que hago fundamentalismo económico. Es verdad que el déficit fiscal no hay muchas maneras de financiarlo que sea o con deuda o con emisión monetaria. Y cualquier de las dos cosas termina siendo negativa para la gente de menor recursos".

"El acuerdo con el FMI podría ayudar a bajar la inflación. Porque te permite seguir creciendo. El crecimiento te financia parte del déficit, porque recaudás más. El crecimiento supone creación de empleo genuino. Los números del 2021 muestran esto", añadió.

Para Aracre, el crecimiento económico permite incorporar gente al sistema, por lo que se aumenta la distribución. "Eso es lo que tenemos que lograr en Argentina. Para bajar la pobreza a valores más razonables necesitamos cinco años de crecimiento fuerte", enfatizó.

El preacuerdo con el FMI y el campo

Por otro lado, Aracre comentó cómo podría repercutir el principio de acuerdo con el FMI en el sector agrícola, donde aclaró que la falta de dólares "viene administrándose con mucha prudencia y escasez".

Sobre este punto hizo su principal análisis: "El acuerdo con el Fondo abre la disponibilidad de dólares para poder importar. Argentina tiene una matriz de exportación donde el 80 por ciento requiere de insumos importados. No tener los dólares suficientes erosiona la posibilidad de crecer".

"Entonces, este acuerdo permite evitar que los dólares se vayan a otras cuestiones que no tienen que ver con la producción económica. Despeja esa incertidumbre. Da tranquilidad al mercado cambiario", comentó enfático.

Por otro lado, destacó que el acuerdo "genera una expectativa de cierta disciplina fiscal a mediano plazo". Comentó: "La meta fiscal no es para asustarse, se supone que tiene que ver con mejoras de productividad y mayor recaudación. Confío en el gobierno, no en el Fondo".