El director de Emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Michael Ryan, aseguró este martes que no hay pruebas de que la variante ómicron de coronavirus "provoque una enfermedad más grave", que las cepas anteriores.

"El patrón general que estamos viendo hasta ahora no muestra un aumento de la gravedad. De hecho, en algunos lugares del sur de África se están registrando síntomas más leves", dijo.

En diálogo con la agencia AFP, Ryan sostuvo también que "no hay ninguna razón para dudar" de la eficacia de las vacunas actuales contra ómicron, que fue detectada por primera vez hace pocas semanas en los territorios del sur de África y que se encuentra en 40 países actualmente.

"Tenemos vacunas muy eficaces que han demostrado su poder contra todas las variantes hasta ahora, en términos de gravedad de la enfermedad y de hospitalización, y no hay ninguna razón para pensar que no vaya a ser así con ómicron", detalló el especialista.

Asimismo, el funcionario del organismo perteneciente a las Naciones Unidas explicó que los estudios aún están en "una fase temprana", ya que la variante se detectó apenas el 24 de noviembre.

Las declaraciones del experto se conocen luego de que el principal asesor de manejo de la pandemia de los Estados Unidos, Anthony Fauci, manifestara que los primeros indicios sobre la gravedad de la variante ómicron del coronavirus son “un tanto alentadores”, aunque advirtió que aún falta información.

“Aunque es muy temprano para hacer aseveraciones definitivas, hasta ahora no parece que haya un gran grado de gravedad. Los indicios son un tanto alentadores”, afirmó Fauci a la CNN.