A pesar de que están prohibidos por el Código Urbanístico, el Gobierno porteño autorizó la construcción del “primer country urbano” de la ciudad de Buenos Aires, en un predio ubicado en el barrio porteño de Villa Devoto. Se llama MilAires, lo desarrolla el grupo ECIPSA y ya desató una ola de reclamos de los vecinos de la zona y un pedido de informes del Frente de Todos en la Legislatura.

El “country urbano” – así lo promociona la empresa constructora ECIPSA – será construido en un predio de tres hectáreas ubicado en la colectora de la avenida General Paz, entre Salvador María del Carril y Lastra.

Según alertó por AM750 el legislador porteño Matías Barroetaveña (Frente de Todos), por las dimensiones deberían ceder entre un 25 y un 50 por ciento para espacios públicos.

Lo más llamativo es que en la Ciudad de Buenos Aires el Código Urbanístico prohíbe desarrollos inmobiliarios del estilo tipo country o barrios cerrados.

Pero aún más insólito es que en una de las parcelas del terreno funciona la Escuela N.º 19 y un polideportivo perteneciente al Distrito Escolar N.º 17, según publicó Página/12.

En el sitio oficial, la constructora promociona al country como un “desarrollo inmobiliario de uso residencial que está emplazado en un terreno de más de 29 mil metros cuadrados”.

Precisan que se construirá un “complejo de cinco bloques de cinco pisos de alta calidad”, que contará con “más de 1.700 metros cuadrados destinados a amenities”.

Además, la propuesta incluirá “espacios verdes y piletas, solárium y jacuzzi”, así como cocheras, gimnasios y terrazas con parrilla “para vivir cada día como si estuvieras de vacaciones”. Obviamente, todo estará enrejado.

Los barrios cerrados, prohibidos en CABA

Lo curioso del megaproyecto inmobiliario es que en la Ciudad de Buenos Aires este tipo de construcciones están prohibidas. El artículo 7.2.1 del Código Urbanístico precisa que “queda prohibida la paorbación y materialización de barrios con perímetros cerrados”. “No están permitidos”, insistió Barroetaveña.

El legislador del Frente de Todos recordó que existen emprendimientos que tienen permitido tener calles internas para llegar a los departamentos, aunque aclaró que son aquellos con menor dimensión.

“Deberían ceder para espacios verdes y calles, al no hacerlo, tienen circulación interna entre edificios”, indicó.

El Código Urbanístico prevé que si se pretende construir en superficies mayores a una hectárea y media se deben ceder a la Ciudad entre el 25 y el 50 por ciento de las tierras para uso público.

Y precisa que se deberá destinar “no menos de una tercera parte de la superficie cedida a espacios verdes de uso público y acceso irrestricto”.

Para cubrirse, los desarrolladores inmobiliarios aclararon en la letra chica que el uso de la palabra “country” es una referencia y no la figura legal en la que se enmarcará la construcción.

De todos modos, hay algo concreto: será un megapredio cerrado, enrejado y de lujo al cual no podrá ingresar cualquier persona.

La venta de propiedades

Semanas atrás comenzó la venta de las primeras 381 unidades y 180 cocheras, y la proyección de ECIPSA es entregar las unidades para diciembre de 2024.

Más irregularidades

Barroetaveña precisó que en 2017 la Subsecretaría de Registros de Interpretación y Catástros ya había rechazado la obra por exceder los parámetros constructivos del Código de Planeamiento Urbano, que tiempo después fue reemplazado por el Código Urbanístico.

Si bien se presentó un nuevo proyecto que eliminaba un piso, tampoco fue aprobado.

La irregularidad es que le aplicaron una normativa que aún no había entrado en vigencia. Según Barroetaveña, la constructora pudo haber tenido acceso a información para que apliquen la normativa futura. De hecho, la semana pasada la Justicia frenó la construcción de dos torres en Las Cañitas por una situación similar.