El expresidente Mauricio Macri reveló finalmente que los 45 mil millones de dólares que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le prestó a Argentina durante su mandato no fue para "pagar deudas" anteriores, como declaró el exministro de Economía, Hernán Lacunza, sino que ese dinero se destinó a "pagarle a los bancos comerciales que se querían ir" del país.

De esta manera, el exmandatario confesó que su Gobierno utilizó el dinero para financiar la fuga de capitales, tal como denuncia el oficialismo, y facilitar el mercado para los grandes jugadores. En septiembre de 2019, Lacunza, el último titular de la cartera económica de Macri y quien dispuso el cepo al dólar tras las PASO de ese año, había afirmado que tras el préstamo, "bajó 43.000 millones de dólares la deuda en manos del sector privado". "Los números están ahí, se usaron para eso", indicó.

Macri contó también que el exmandatario de Estados Unidos Donald Trump "se portó muy bien" y "colaboró muchísimo" con su Gobierno, entre otras cosas por el apoyo al crédito del FMI solicitado por el Gobierno argentino en 2018.

"La plata del FMI, que es la plata de los demás países, la usamos para pagar a los bancos comerciales que se querían ir" aseguró el expresidente en declaraciones a CNN en Español y justificó: "Porque tenían miedo de que volviera el kirchnerismo". Sin embargo, el crédito stand by se concretó en 2018, no en 2019 cuando se celebraron las elecciones presidenciales.

En este sentido, criticó la negociación vigente para alcanzar un acuerdo que permita pagar la deuda en condiciones "que cuiden a la Argentina", según palabras del actual ministro de Economía, Martín Guzmán: "El FMI pide un plan; si hay un plan, esto se refinancia. No están para ganar plata, sino para que a Argentina le vaya bien. Necesitan que todos los países del mundo se fortalezcan y contribuyan a mejorar la calidad de vida de los habitantes de este planeta".

Elecciones 2021

Acerca de la política doméstica, aseguró que en 2023 habrá "muchos candidatos" y que el que represente a Juntos por el Cambio (JxC) se dilucidará en las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) de ese año.

"Todos los curas quieren ser Papas, y dije 'Yo los voy a ayudar a todos a crecer, a mostrar su capacidad de liderazgo pero todos acá adentro', y en el 2023, en una PASO, la gente elegirá", afirmó Macri sobre su rol en estos dos años fuera del Gobierno, en los que dijo que se focalizó en "que haya una oposición sólida".

Espionaje ilegal

En otro tramo de la entrevista, Macri criticó la actuación del juez federal subrogante de Dolores, Martín Bava, y negó responsabilidades en la causa por el supuesto espionaje ilegal a los familiares de los tripulantes del submarino ARA San Juan.

"Yo no espié, no mandé espiar a nadie, nunca tuve ninguna información de espionaje sobre los familiares del ARA San Juan ni ningún otro buque en mi poder, nunca gasté dinero del Estado en ninguna actividad ilícita", reiteró.

Entonces consideró: "Esta intempestiva convocatoria a indagatoria sin fundamentos, en un proceso electoral, tiene una actitud repudiable política".

Macri dijo que todo fue "muy desprolijo" porque "ni siquiera habían pedido la autorización" para que pudiera hablar de temas de inteligencia y agregó: "Lamento, porque en la Justicia argentina hay una enorme mayoría de jueces que hacen las cosas bien".

"En 2015 recibimos un Estado quebrado, en el tercer subsuelo. Prometimos un edificio de 50 pisos. Llegamos a la planta baja, estábamos construyendo el primero, lejos de la expectativa que generamos, por eso no llegamos al 50% (de los votos)", interpretó Macri sobre su derrota electoral en 2019.

Y siguió: "Lamentablemente, en estos 20 meses, este ejército de demolición no sólo no siguió construyendo el edificio sino que volvió, no al tercer subsuelo, sino al sexto subsuelo".

También criticó a la vicepresidenta Cristina Kirchner al señalar que "hace rato" que, junto a su entorno, "han perdido contacto con la realidad. Estamos frente al colapso de la insensatez", opinó.