Mauricio Macri volvió a desatar una fuerte polémica a raíz de una serie de declaraciones tildadas de gordofóbicas. Durante una entrevista en la plataforma Twitch, el expresidente habló del beso en el pie a una señora en Tucumán en plena campaña de 2019 y aseguró que “los que quisieron subirla (al escenario) pasaron parte de hernia”.

Los dichos fueron durante una entrevista que Macri ofreció por la plataforma de streaming Twitch a Rosendo Grobocopatel, hijo del poderoso empresario Gustavo Grobocopatel, quien le preguntó cómo había terminado “besándole una pata a una señora”.

“Estábamos en un viaje y cuando llegamos a Tucumán la plaza desbordaba, había 40 mil personas, era una locura. Era un viaje hacia el futuro, sentir todos juntos que teníamos que estar unidos para defender la libertad y la posibilidad de ser”, aseguró Macri.

Entre risas, Macri contó que la mujer a la que le besó el pie “empezó a pedir que quería subir” a saludarlo. “Y yo dije: ‘bueno, vamos a subirla’. Pero era muy difícil, porque estaba muy abajo, los que quisieron subirla pasaron parte de hernia”, disparó entre risas el expresidente, y con tono burlón.

“Ahí me dijo que había perdido un zapato, y era la Cenicienta. Siempre soñé tener una Cenicienta tucumana”, afirmó el expresidente.

“En cualquier momento voy a ir a Tucumán a darle un beso y un abrazo”, afirmó luego el expresidente.

Luego, el entrevistador le retrucó con otro comentario llamativo: “Juliana, no te `pongas celosa, eh. Es estrictamente profesional”. Macri replicó: “Después me exigió que le bese varias veces los pies para compensarla”.

El beso en el pie

El beso fue en plena campaña electoral en 2019. La mujer, Manuela Ledesma, luego confesó ser una militante de Juntos por el Cambio con pasado militante en la agrupación del genocida Antonio Bussi, condenado en 2008 por delitos de lesa humanidad.

Según publicó el diario La Gaceta, Ledesma “fue militante durante más de 20 años de Fuerza Republicana”, el partido político que devolvió a la gobernación al exgobernador de la dictadura.

La "Cenicienta" de Macri tuvo un cargo en la municipalidad en el apogeo del bussismo en la segunda mitad de los 90. Incluso fue vista en el velatorio del genocida, en noviembre de 2011, donde le dio el pésame a Ricardo Bussi, hijo del militar.