La crisis climática provocó más de 30 millones de desplazamientos de hogares durante 2020, un número que triplica la cantidad de desplazados por violencias o conflictos, y es el más alto desde 2012.

Así lo reveló un estudio de la Fundación del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Argentina. "No existe un lugar seguro frente al cambio climático, es una emergencia global", sentenció la entidad.

La Fundación detalló que se registraron 30,7 millones de desplazamientos en más de 140 países. De ese total, 14 millones fueron por inundaciones; 13,6 millones por tifones, ciclones o huracanes; 1,2 millones escaparon de incendios descontrolados; 988 mil a distintos tipos de tormentas; 518 mil a erupciones volcánicas; otros 137 mil a terremotos; 46 mil a temperaturas extremas; y unos 32 mil a sequías.

"El cambio climático está forzando a millones de personas a huir de sus hogares para salvar sus vidas. Se producen inundaciones que arrasan comunidades enteras, sequías que generan hambrunas masivas, tormentas y ciclones que destruyen casas, escuelas, hospitales e historias de vida", indica el informe.

"El cambio climático es la crisis que define nuestra época, y el desplazamiento por desastres es una de las consecuencias más devastadoras del fenómeno", subraya.

Según precisó Carolina Martinenghi, directora de Comunicaciones de Fundación Acnur Argentina, los países “frágiles” son los que corren el mayor riesgo de exposición, ya que “las personas en situación de vulnerabilidad en países afectados por el conflicto suelen padecer consecuencias desproporcionadas".

En ese sentido, el informe evidencia que el 80 por ciento de los refugiados desplazados proceden de los países más vulnerables y menos preparados para adaptarse al cambio climático. Asimismo, el 66 por ciento de los desplazados viven en países con dichas características.

La directiva expresó su preocupación por “la escasez de recursos naturales” que “va en aumento”, “el ganado y los cultivos luchan por sobrevivir en lugares donde las condiciones se tornan cada vez más áridas, frías o húmedas y esto pone en riesgo los medios de vida", agregó.

Por último, aseguró que sin una acción urgente, rápida y realmente ambiciosa, "los desastres climatológicos podrían duplicar el número de personas que precisan asistencia humanitaria hasta alcanzar los 200 millones anuales en 2050”.