Después de casi ocho años, Julieta Díaz volvió al mundo del teatro dándole vida a Precoz, una obra dirigida por Lorena Vega y basada en una nouvelle de la escritora Ariana Harwicz, en la que está acompañada por Tomás Wicz. En este contexto, la actriz repasó en IP la situación del sector cultural después de la peor parte de la pandemia: "Hay algo de esencial en la cultura, no somos solo entretenedores", sostuvo.

"Con la pandemia tuvimos que cambiar nuestros rituales", comenzó su análisis la artista de 44 años, que también consideró: "La cultura es para nosotros, en todo el país, un movimiento muy intenso, muy rico. A la gente le gusta salir, ir al teatro, al cine, escuchar recitales, muestras. Me parece que hay algo ahí, que había mucha sed de eso".

En este contexto, Díaz habló sobre uno de los debates que trajo el aislamiento social, la esencialidad de las actividades, "Somos trabajadores que estamos movilizando un encuentro cultural, una manera de ver. No solamente estamos entreteniendo, hay piezas que realmente atraviesan", sostuvo.

Precoz

Precoz es una obra de teatro que desarma el vínculo tóxico entre una madre y su hijo, una dupla encarnada por Julieta Díaz y Tomás Wicz, en donde la dinámica de la relación genera una fantasía entrópica que cuestiona a las instituciones. "Es una obra muy fiel a la novela, un cruce entre teatro y literatura", definió la artista. "Es un texto maravilloso".

Díaz agregó, sobre la obra que se exhibe en el teatro Santos 4040 (Santos Dumont 4040, Chacarita, CABA): "Tiene poética. Se nota que viene de la literatura, y se disfruta mucho hacerla. En el teatro, en esta versión, realmente se logra llevar al drama a los dos personajes y a este vínculo, que está tan en el borde todo el tiempo".

La actriz dijo además que está muy feliz de volver a hacer teatro después de ocho años y comentó que Precoz se frenó a un mes de su estreno debido a la pandemia, y que para no perder el ritmo hicieron ensayos online y un podcast producido por Octubre TV.

Género

Díaz también habló sobre el género en el teatro y el abucheo que sufrió Mercedes Moran en el Teatro Colón. "Creo hay por un lado una apertura de cabeza y corazón con respecto a las diversidades y mujeres, pero por el otro lado hay un nivel casi fascista muy recalcitrante que me preocupa mucho y que hay que tratar de desactivar", afirmó. Además, agregó que hay que "intentar entender cuáles son las necesidades de esos grupos".

Y específicamente sobre el repudio público a Morán, dijo: "Estamos hablando de abuchear a una actriz porque hace una pieza que está modificada por un autor, y vista por un público conservador. Me parece que es matar al mensajero. Podés comentarlo en las redes, o pedir el libro de quejas del teatro, pero hay algo de la inquisición, de la quema de brujas, que sigue dando vueltas y me preocupa".

Por último, Díaz afirmó que sobre este punto "no hay grieta". "Me parece violento. Estamos hablando de Mercedes Moran, una persona muy justa y una gran artista. Además, estamos en democracia, en 2021, tenemos que abrir las cabezas. El arte es una forma más de ver el mundo", concluyó.