En su editorial, Cynthia García reflexionó sobre la paridad de género en el gabinete nacional.

Con la reestructuración del gabinete hubo una fuerte crítica a la falta de mujeres que tiene el gobierno. Efectivamente hay un déficit de mujeres en la conformación de gabinete pero quería proponerles pensar la cuestión del patriarcado y la lucha de clases de manera enlazada.

Lo que propongo es que pensemos los feminismos inmersos en la lucha de clases y que demos las respuestas a los antagonismos de manera frentista más que sectorial. Yo no podría creer jamás que los derechos de las mujeres son derechos de las minorías, o que los derechos de género sean sólo ganancia para las minorías.

Con una sociedad sociedad más igualitaria e inclusiva, ganamos todos. Es falso ese planteo excluyente que circula "era menos DNI no binario y más plata en la calle". Son esas dicotomías, esos falsos antagonismos que se construyen.

No es excluyente, no es menos derechos para las minorías y más plata en el bolsillo de la gente. No hay ahí un antagonismo. No hay ahí una exclusión de una o de otra situación, porque si no llegamos al crimen perfecto que es el neoliberalismo.

El neoliberalismo no puede ser un crimen perfecto. No puede triunfar como sistemas de cosas, cosificando almas a su paso. Cosificar es una palabra cara para las mujeres que la hemos sufrido en el cuerpo tanto como sufrimos la salvaje, concentrada y desenfrenada acumulación del capital que es el neoliberalismo.

El movimiento de mujeres dio la pelea en avanzada hacia la discusión neoliberal. El movimiento de mujeres enfrentó al neoliberalismo con sus conquistas y con el cuerpo en la calle. Fue disruptivo del neoliberalismo. Buscó esos caminos emancipatorio y los logró.

Hay que pensar las conquistas de mujeres, no tanto desde el plano simbólico, sino con la bajada de esas conquistas al territorio. La feminización de la pobreza es un dato de la realidad. Por eso digo pensar los feminismos desde una mirada emancipatoria, inmersa en la lucha de clases, para que el neoliberalismo no se convierta en un crimen perfecto.

Es verdad que falta mujeres en el gabinete, como es cierto que por primera vez hay un ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad. Las conquistas no pueden ser sectoriales porque los ataques de los autores de esa intención del crimen perfecto son por todos lados.

Son ataques multi frentistas. Por eso, para buscar los caminos de la emancipación las respuestas deberán ser multi frentistas, anti patriarcales, pero también anti imperialista, ambientales y anti coloniales.