El presidente Alberto Fernández encabezó este lunes la toma de juramentos de los nuevos funcionarios y ministros de su Gabinete, y manifestó que no lo van a ver "atrapado en disputas innecesarias ni en disputas internas" en relación con la crisis política desatada la semana pasada tras la derrota en las PASO.

"No me van a ver atrapado en disputas innecesarias ni en disputas internas. Mi única preocupación es que los argentinos sean felices, después de tanta desdicha en los cuatro años del gobierno anterior y en los dos años de pandemia", expresó.

Asimismo, el mandatario planteó: "No somos parte del país que quiere flexibilizar derechos de los que trabajan". En esta línea, afirmó que hay "dos modelos de país en pugna" y el del Frente de Todos "no es el que se despreocupa de la salud pública y abandona a los argentinos a su suerte".

Respecto al resultado de las elecciones primarias, donde el oficialismo fue derrotado en la mayoría de los distritos, inclusive en la provincia de Buenos Aires, Fernández indicó que el pueblo de la Nación "dio un veredicto" y por ello, al ser parte de un movimiento que "sabe escuchar la demanda popular", va a tomar en cuenta "los reclamos y las cocas que se hicieron mal".

"A lo largo de la semana escuché a muchos porque quiero cumplir con mi palabra de entender por qué la gente votó como voto. En realidad, hay veces en que los dirigentes se enojan con la gente cuando la gente no los vota, pero nosotros nos enojamos con nosotros mismos, porque algo hicimos mal", reflexionó.

Por otro lado, el mandatario aseguró que su administración "debate de cara a la gente" y que planten sus diferencias "con el único sentido de superar esta instancia (la pandemia) y encaminarnos en un tiempo mejor". "Me preocupa más un movimiento político que no discute que uno que reflexiona", dijo.

Previo a tomar el juramento a los nuevos integrantes de su gestión, el Presidente dijo que las medidas económicas que se van a comunicar en las próximos días estaban "previstas de antemano" y tienen como objeto "dar respuesta a un electorado que la pandemia lo ha afectado" y que el crecimiento económico "no les llega con la velocidad que ellos quieren".

Al finalizar su discurso, Fernández le agradeció a los ministros salientes por el "esfuerzo que han hecho, en el escenario en el que trabajaron".

"Vamos a trabajar todos unidos. Sin exclusión, trabajaremos por todos y todas, los problemas de la Argentina no los resuelve un grupo de ministros, ni el presidente, ni un partido político", precisó.

Y concluyó: "Algunos aprovecharon la pandemia para dividirnos. Hoy vamos a trabajar con todos y todas, tenemos que reconstruir y nadie debe quedar afuera de este tiempo".

Alberto Fernández le tomó juramento formalmente en sus cargos Aníbal Fernández, al frente del Ministerio de Seguridad; Julián Domínguez, en Agricultura, Ganadería y Pesca; Jaime Perczyk, en Educación; y Daniel Filmus, en Ciencia y Tecnología.

Además, en la nueva estructura gubernamental, el gobernador de Tucumán Juan Manzur será el nuevo jefe de Gabinete, en reemplazo de Santiago Cafiero, quien se desempeñará al frente del Ministerio de Relaciones Exteriores. Los cambios se completaron con Juan Ross a cargo de la secretaría de Comunicación y Prensa.