En la apertura de Aunque es de noche, Pablo Marchetti relató la historia de Centro Storico Lebowski, un club de la sexta división de Italia que nació en 2010, tiene mil socios que se encargan de todo y acaba de contratar a una figura del fútbol italiano.

“¿Es posible hoy pensar en un fútbol guiado exclusivamente por la pasión? Para sorpresa de muchos, la respuesta es sí. Es posible un fútbol lírico, romántico que siga exclusivamente la pasión. Si no me creen, se van a tener que hacer hinchas del Lebowski”, sostuvo Marchetti para, luego, comenzar a contar la historia del club.

El origen

El Gran Lebowski es una película de 1998, dirigida, producida y escrita por los hermanos Cohen e interpretada por Jeff Bridges, que si bien en el momento de su estreno no tuvo mayores repercusiones, con el paso del tiempo se convirtió en un film de culto. Tal es así que se creó una "Lebowski Fest" que reúne a sus fanáticos, y también un club de fútbol a modo de homenaje: el Centro Storico Lebowski.

“En 2010 un grupo de hinchas de la Fiorentina decidieron que estaban cansados de ver que el fútbol se hubiera transformado en un negocio. Creían que se había perdido la pasión y que era necesario devolverle al fútbol su espíritu romántico. Renunciaron, así, a su condición de socios de la Fiorentina y crearon el Lebowski con una consigna: el club sería de los socios y no habría jerarquías. Todo en el club se manejaría de manera igualitaria, horizontal, sin patrones, ni jefes, ni presidentes, ni dirigentes, ni secretarios, ni vocales”, relató el conductor.

En su nacimiento el club inició en la octava división, aunque en sus cortos once años de vida lograron llegar a la sexta división de la liga italiana. Uno de sus más recientes logros fue el fichaje de de Borja Valero, un futbolista español ex jugador de la Fiorentina y del Inter, además de haber formado parte de la Selección española en 2011.

Borja Valero en la Fiorentina, donde fue capitán del equipo

A pesar de que la Fiorentina había decidido renovarle su contrato, Valero decidió irse al Lebowski. “El español prefirió dar un golpe romántico al final de su carrera -señaló Marchetti-. La llegada de Borja Valero supone para el Lebowski una revolución aún mayor en escala que la provocada por Messi en París”, añadió.

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Borja Valero con los socios del Centro Storico Lebowski

La organización

Cada socio del Centro Storico Lebowski tiene un voto en las asambleas donde se decide desde a quién fichar hasta cuál será la nueva indumentaria a usar o cómo se llevará adelante la pretemporada.

También, sus integrantes se encargan de las tareas cotidianas: cortan el césped del campo de juego, mantienen las instalaciones, organizan recaudaciones de fondos y realizan las tareas administrativas.

“Uno de los lemas del Centro Histórico Lebowski es 'Creer en el fútbol romántico' y los hinchas de este equipo se hacen llamar Los últimos que quedan. Por suerte, en este mundo del fútbol hiper mercantilizado existe un club como el Centro Histórico Lebowski. Y, por suerte, también existe un jugador como Borja Valero”, concluyó Marchetti.