¿Dónde miramos el partido cuando juega nuestro equipo de fútbol? ¿Lo miramos siempre en la misma posición, con las mismas personas, usando la misma ropa?
Si de cábalas en el deporte se trata, cada uno y cada una tiene la suya, aunque hay una persona que es sinónimo de haber instalado una de las supersticiones más famosas del fútbol: Carlos Bilardo y su Kiricocho.
Cuenta la historia que Bilardo, cuando era entrenador de Estudiantes de la Plata, comenzó a convocar a un hincha del club como “mufa” para los rivales. Se trataba de Juan Carlos “Kiricocho”, quien cada vez que presenciaba un entrenamiento del club platense, alguien del equipo sufría una lesión, entre otras cosas. Lejos de echarlo, Bilardo tuvo una idea mejor: enviarlo a recibir a los rivales para esparcir la mala suerte.
A partir de allí, la “cábala Kiricocho” se extendería por el fútbol argentino y del mundo tras el éxito de sus resultados. Según contó el periodista y escritor Andrés Burgo en diálogo con Jorgelina Rocca en La Casa Invita, “primero Maradona y Simeone lo llevaron al Sevilla y, a partir de ahí se fue diseminando”. “Hoy lo vemos en la Eurocopa y en la Champions League”, añadió.
