El presidente Alberto Fernández rechazó el "intervencionismo" en Cuba y pidió levantar los bloqueos que pesan sobre la isla para que el país pueda superar los problemas sociales y económicos que provocaron que miles de cubanos salgan a las calles a protestar contra el gobierno de Miguel Díaz-Canel.

"Tengo claro que si realmente nos preocupa humanitariamente lo que pasa en Cuba, hay que terminar con los bloqueos, que están haciendo un daño incalculable a la isla", afirmó Fernández.

El presidente de Cuba, Díaz-Canel, afirmó este lunes que Estados Unidos tiene "una política de asfixia económica para provocar estallidos sociales en el país", tras las protestas contra el Gobierno que se registraron ayer en varios sectores de la isla, ante lo cual su par norteamericano, Joe Biden, le pidió al “régimen” isleño" que "escuche a su pueblo".

"No hay nada más inhumano en una pandemia que bloquear económicamente a un país. Es el mismo bloqueo que le impidió a Cuba acceder a respiradores artificiales para hacerle frente al coronavirus", señaló Alberto Fernández, quien comparó la situación de la isla con la realidad de Venezuela.

"Lo mismo sucede con Venezuela. Terminen con los bloqueos y que después sean los venezolanos quienes determinen qué gobierno quieren", dijo el mandatario argentino.

"Los pueblos tienen que resolver sus problemas. No yo ni ningún otro país del mundo tiene que determinar lo que debe suceder en Cuba. Pero tenemos que favorecer que los pueblos encuentren el diálogo y los caminos de salida", concluyó Fernández.

Díaz-Canel, quien ayer se trasladó a San Antonio de los Baños donde se iniciaron las protestas que luego se replicaron en varios centros urbanos, desmintió, en un mensaje transmitido por cadena nacional, que haya llamado a la violencia cuando instó a la población a concentrarse en las calles para rechazar esas manifestaciones.

"No llamamos al pueblo a enfrentar al pueblo sino que llamamos al pueblo a defender su revolución", argumentó Díaz-Canel, y sostuvo que la población se defendió ante los actos de violencia y vandalismo protagonizados por quienes iniciaron las manifestaciones.