Los fiscales que investigan la muerte de Diego Armando Maradona avalaron hoy un planteo de las hijas del ex futbolista, Dalma y Gianinna, y pidieron que su exapoderado, Matías Morla, sea apartado de la causa como abogado querellante en representación de las hermanas del exfutbolista.

"Su intervención en el proceso como patrocinante de las particulares damnificadas, bien podría darle la posibilidad, en un futuro, de obstaculizar, impedir o imposibilitar la reconstrucción de los hechos", dice el dictamen firmado por los fiscales generales adjuntos de San Isidro, Patricio Ferrari y Cosme Iribarren, y la fiscal de Benavídez Laura Capra.

Situación de cada uno de los acusados de la causa:

Los fiscales que investigan la muerte de Maradona eligieron un esquema de indagatoria "piramidal" donde en la punta de esa pirámide está quien para ellos tenía la mayor responsabilidad en el cuidado de la salud de Diego. En este caso, Leopoldo Luque, seguido por Cosachov y Díaz.

En la base de esa pirámide se encuentran los enfermeros -Dahiana Madrid y Ricardo Almirón- declararon prácticamente lo misma- y Perroni dijo que nunca había tenido contacto con Maradona, ni siquiera le habían dado su Historia Clínica y mucho menos sabía que padecía una cardiopatía.

Almirón es sospechoso de no haber asistido a Maradona los días 24 y 25 de noviembre “a sabiendas de su delicada situación y con conocimiento de que muy probablemente tal omisión llevaría al desenlace fatal que finalmente ocurrió’', según la acusación fiscal. Es, supuestamente, la última persona que lo vio con vida.

Y además, este enfermero habría complicado la situación de sus jefes, coordinadores de la empresa de enfermería y de la prepaga, y de la psiquiatra Agustina Cosachov. Dijo que la internación domiciliaria era deficitaria y que había advertido a los médicos por una taquicardia que tenía Maradona.

Mientras que la médica Nancy Edith Forlini, se autoadjudicó el carácter de coordinadora general par la prepaga Swiss Medical, y quien concentraba todas las comunicaciones respecto de la internación domiciliaria de Diego.

La junta indicó que Maradona “comenzó a morir, al menos, 12 horas antes de las 12.30 del día 25/11/2020, es decir, presentaba signos inequívocos de periodo agónico prolongado’', por lo que “el paciente no fue debidamente controlado desde las 00.30 horas’'.

En tanto a Luque y Cosachov, los fiscales deberán determinar si el primero era un "médico tratante" o un "médico de cabecera", y si la psiquiatra administró bien la medicación y la asistencia de su especialidad para un paciente con abstinencia de drogas y alcohol.

El psicólogo Díaz, a su vez, era quien tenía más contacto con Diego, y con el que él tenía "más confianza", según consta en la causa. Y quien podría entrar en el mismo lote de responsabilidades que Luque, Cosachov y Forlini, en el mapa de la Fiscalía.