La jugadora de futsal y periodista Delfina Corti charló acerca de su carrera profesional y analizó los avances en el fútbol femenino en nuestro país y el mundo. “En sudamérica no se está avanzando tan rápído como en Europa”, aseguró.

“Arranqué a jugar al fútbol cuando era chiquita; se muere mi papá y creo que mi hermano encontró en mí con quién jugar y compartir la pasión por Racing”, contó Corti acerca de sus inicios como deportista.

Los años de jugar con su hermano y primos duraron hasta los años de la primaria, cuando era obligación que las chicas juegasen al handball y los chicos, al fútbol. Sin embargo, el secundario le daría la revancha: “En la secundaria tuve la oportunidad de jugar y, cuando terminé me anoté en diferentes torneos, me fui a probar y quedé en futsal”, relató.

“La primera vez que tuve un entrenador fue a los 23 años- dijo- Muchas veces me hicieron creer que jugaba como Maradona cuando era chica, pero en este momento perdí la magia”, bromeó Corti sobre su recorrido profesional.

La jugadora del Club Pinocho también habló sobre el estado del fútbol femenino en Argentina y afirmó que si bien hubo avances, aun queda un largo camino por recorrer para su total profesionalización.

En esa línea, explicó que en España, recientemente el fútbol femenino fue declarado profesional, lo cual establece no sólo un vínculo laboral sino, además, que el dinero por los derechos de televisación sea para los clubes.

“En sudamérica no se está avanzando tan rápido como en Europa, pero sí hay avances como que en Argentina sea un deporte semiprofesional. Falta que se federalice, falta que los clubes se comprometan a querer que el fútbol femenino crezca y falta la visibilziación, porque los partidos noe se pueden ver si no depende de las cuentas partidarias”, aseveró.