Continúa la polémica con la Copa América y su sede en Brasil. Jair Bolsonaro ya dijo que el campeonato en el pais vecino se juega "como sea" aún se espera la definición de los jugadores de la Selección que se habían manifestado en contra. Se suma una nueva, el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol fue apartado de su cargo por denuncias de abuso sexual.

Desde que Jair Bolsonaro, coordinado con la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), aceptaron en Brasil la Copa América, los jugadores brasileños y el DT, Tite, manifestaron malestar tanto por no ser consultados, como por la situación de la pandemia en el pais.

La nueva polémica que se sumó es que el presidente de la CBF, Rogerio Caboclo, fue licenciado por 30 días de su cargo luego de ser acusado de acoso sexual a una funcionaria de la institución, lo cual debilita todavía más la posición de la CBF.

La salida temporal de Caboclo se da en medio de fuertes presiones de patrocinadores y otros dirigentes de la CBF. Además, su relación con Tité y el plantel de la Selección de Brasil era fría y de mucho distanciamiento

Todavía la selección no definió si va a jugar o no y desde la Confederación admitieron que si no quiere jugar este plantel, convocarán otros jugadores y a otro director técnico.

Desde Brasil, el periodista Marcelo Claudio explicó que la salida de Caboclo "tal vez sea una solución porque la nueva dirigencia va a trabajar con dos postulados: que se quede el técnico Tite y que continúe la planificación de la Copa". 

Los jugadores han atendido el pedido de Tite, de solo pronunciarse después del partido de este martes contra Paraguay, en Asunción, para no perjudicar el desempeño del equipo y darán un comunicado este martes.