El presidente Alberto Fernández se reunió este lunes en la ciudad de Lisboa con el primer ministro de Portugal, Antonio Costa, en el marco de la gira europea, donde recibió un fuerte respaldo de ese país para continuar con las negociaciones de la deuda externa que nuestro país mantiene con el Fondo Monetario Internacional.

“Le he transmitido todo el apoyo de Portugal en este tema e intentaremos sensibilizar al FMI para que al menos durante esta crisis se puedan suspender los sobrecargos”, aseguró Costa.

Portugal entiende bien lo que es librarse de las medidas dictadas por el FMI y dar curso a políticas contrarias al ajuste y las reformas laborales y tributarias.

“Lo que hizo Costa de novedoso es formar gobierno por primera vez con el Bloco de Esquerda y el Partido Comunista. Si bien no pusieron ministros en el gobierno esos dos partidos, lo que hicieron fue que la política fuera para revertir toda la receta de ajustes del gobierno anterior”, explicó el economista y periodista Alejandro Bercovich.

Bercovich sabe del tema: fue el responsable del documental “Fondo, otra vez la misma receta", que pone el foco en las consecuencias socioeconómicas de la aplicación de las recetas de ajuste del FMI en Grecia y Portugal.

“Cuando gana Costa, revierte todas esas políticas de ajuste que había impuesto el FMI y ahí Portugal empieza a crecer, a los tres años consigue revertir el déficit fiscal”, detalló.

El periodista se refirió, también, a la situación de nuestro país frente a la deuda contraída con ese organismo y aseguró que desde el gobierno se demora el acuerdo al tener que optar por firmar en lo inmediato y prorrogar el pago de la deuda, aunque las exigencias vendrán en materia social. “El Fondo no permitiría nunca un anuncio como el que hubo el viernes de duplicar la Tarjeta Alimentar. Ese tipo de intervenciones son las que hizo en Portugal y de las que Portugal se deshizo”, aseguró.

En ese sentido, remarcó: “Si nosotros pateáremos esta deuda a diez años, después hay que meter 45.000 millones de dólares en seis años, y eso es impagable. Aunque nos hagamos híper productivos, tendríamos que tener de sobra 8 mil millones de dólares de sobra por año para pagarle al fondo. Necesariamente le tiene que poner creatividad el Fondo porque si no lo que va a generar es un ahogo futuro”, remarcó Bercovich.