"Pasan cosas raras con la pandemia", introdujo Adrian Stoppelman en La Mañana, que dedicó su columna a las fiestas clandestinas que fueron desbaratadas este fin de semana.

"Desbarataron una fiesta clandestina en Nordelta. Dice la noticia: "según algunos videos que se viralizaron no respetaban la distancia ni usaban barbijos y además no respetaron las restricciones establecidas durante la pandemia. Señores redactores de noticias de los portales: ¿qué esperaban? ¿Qué respeten la distancia, que usen barbijo y que respeten los horarios? ¡¡Por algo es una fiesta clandestina!!", remató

Es por esto que le pidió a la división “Qué fantástica esta fiesta” un informe para que te des cuenta si estás yendo a una mala fiesta clandestina.

  • Para que no se enteren los vecinos el Dj solo llevó una spica a pilas que capta AM
  • Para poder entrar tenés que mostrar un pcr negativo o demostrar que te dieron las dos dosis de la vacuna
  • El organizador es vegano y abstemio y la única canilla libre es la de agua mineral.
  • A las 8 menos cuarto de la noche el anfitrión dice: Mañana tengo que ir a laburar, y empieza el horario de restricción, la fiesta se terminó.
  • Caes con una botella de champán y te das cuenta que todas las mujeres presentes usan burka y los hombres turbante.
  • El maestro de ceremonias es extremadamente parecido a Juan José Sebrelli
  • La banda que toca es Vitete y sus Boqueteros y el primer tema se llama Arriba las manos esto es un asalto: y desvalijan a todes.
  • Pusieron 4 pantallas gigantes y en todas están pasando, a todo volumen, los programas de La Nación +
  • Corre el alcohol a rolete. Se nota que esa parte está bien organizada: hay champán, bebidas blancas, vino. Y todo transcurre en el mejor clima hasta que tocan el timbre. Y te caen Coco Basile y Pato Bullrich…