El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodriguez Larreta, justificó no haber vacunado a suficientes docentes en la ciudad de Buenos Aires y apuntó al gobierno nacional, al afirmar que “por la cantidad de dosis que nos dieron todavía no llegaron vacunas para los docentes”. De esta manera le contestó al presidente Alberto Fernández, quien este lunes mencionó en un acto que la Ciudad de Buenos Aires está anteúltima en el ranking de distritos en vacunar a los docentes y trabajadores de la educación. La polémica por los docentes vacunados se da en el marco de la judicialización por las clases presenciales, donde la Corte Suprema aceptó tratar la presentación del gobierno porteño que objetó el DNU de Fernández. Larreta adelantó que la Ciudad "acatará" el fallo de la Corte, sea cual sea la decisión del máximo tribunal. "Vamos a acatar los fallos, eso está fuera de toda discusión”, señaló al referirse que su reclamo contra Nación por las clases presenciales finamente será decidido por el máximo tribunal. “Así como acatamos el fallo de la Cámara de Apelaciones de la Ciudad y por eso hoy tenemos clases, vamos a acatar lo que falle la Corte Suprema. Siempre cumplimos la Constitución Nacional. Lo que diga la Corte Suprema, se cumple”, sostuvo. 

Las vacunas, el fondo de la cuestión

Hasta el momento, la Ciudad recibió 713.657 vacunas de las cuales aplicó 636.402 diferidas entre población de más de 70 años y en el día de hoy, se abrió la inscripción para personas de más de 65 años. Rodríguez Larreta explicó que el orden de prioridad para vacunar lo fijó el gobierno nacional: primero los trabajadores de la salud, segundo adultos mayores de 60 años, tercero personal esencial, docentes y policías.Todavía no terminamos de vacunar a mayores de 60. Y por la cantidad de vacunas que nos dio Nación todavía no llegaron vacunas para los docentes. Ojalá el gobierno nacional nos hubiera dado vacunas más rápido y ya estarían todos los docentes vacunados”, le contestó al Presidente. A medida que llega cualquier lote de vacunas al país, el Gobierno las distribuye teniendo en cuenta la cantidad de habitantes de cada distrito. Y cada provincia o distrito decide el criterio para aplicarlas. Es decir, cuáles son las prioridades. La Ciudad de Buenos Aires está anteúltima en el ranking de menor cantidad de docentes vacunados.