Europa atraviesa una gran polémica por la creación de la "Superliga", una iniciativa que modificará la modalidad de los torneos de fútbol, diseñada para disputarse entre 20 equipos a partir de agosto. Ya cosechó el rechazo de la FIFA, la UEFA, federaciones y ligas nacionales e incluso autoridades de Estado.

Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, preside esta nueva liga europea que propone una liga con tres equipos de España, tres de Italia y seis de Inglaterra. El objetivo es reemplazar a la Champions League y no a las ligas locales. 

El argumento de los impulsores de la iniciativa es que la pandemia del coronavirus generó "inestabilidad económica" para sus equipos y para el fútbol local.

La primera diferencia con los torneos tradicionales es que esta nueva liga será "gobernada" por los 15 equipos fundadores.  

Sergio "el negro" Altieri se refirió al rechazo que provocó en Europa esta decisión y sostuvo que "muchos clubes están enojados porque ven que el negocio empieza a crear en pocas manos". "Es una liga europea en la que se disputaran partidos entre semanas para recaudar mas", analizó.

Milán, Arsenal, Atlético de Madrid, Chelsea, FC. Barcelona, Inter de Milán, Juventus, Liverpool, Manchester City, Manchester United, Real Madrid y Tottenham Hotspur son la docena de equipos que se adhirieron a la iniciativa de crear un torneo fuera de las competiciones locales y las continentales que son manejadas por los entes reguladores del fútbol profesional.

Los 12 clubes esperan que se incorporen otros y completar así un grupo de 15 "fundadores", a los que se sumarán cinco equipos más evaluados según su desempeño. Ningún cuadro grande de Francia o Alemania ha accedido de momento a la propuesta.