El príncipe Felipe de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II de Inglaterra, murió este viernes a los 99 años. Fue príncipe consorte de Inglaterra durante 69 años y marido de la reina durante más de siete décadas. “Con profundo dolor, su majestad la reina anuncia la muerte de su amado esposo, su alteza real el príncipe Felipe, duque de Edimburgo”, afirmaron desde la realeza británica en un comunicado. “Su alteza real ha fallecido en paz esta mañana en el Castillo de Windsor”, precisaron. El duque había sido hospitalizado el pasado 17 de febrero “como medida de precaución y por consejo del médico de su alteza real” y fue dado de alta el 16 de marzo. En noviembre, al cumplir el 73 aniversario del casamiento con Isabel II, la reina y su marido lo festejaron haciendo pública una foto de ambos sentados en un sofá de un salón de Windsor, mientras contemplaban una tarjeta de felicitación que les habían enviado tres de sus biznietos, los príncipes Jorge, Carlota y Luis, hijos de los duques de Cambridge.

La vida del príncipe Felipe y su salud

Felipe nació el 10 de junio de 1921 en la villa Mon Repos en Corfú, una isla griega del mar Jónico. Su padre fue el príncipe Andrés de Grecia y Dinamarca, el cuarto hijo del rey Jorge I de Grecia y de la gran duquesa Olga de Rusia (Olga Konstantínova Románova) nieta del zar Nicolás I de Rusia. El comunicado de despedida de la corona británica expresó que “la Familia Real se une a las personas de todo el mundo para lamentar su pérdida”, y anticipó que “se harán más anuncios a su debido tiempo”. La salud de Felipe, de 99 años, se había deteriorado en el último tiempo. En las últimas había sido hospitalizado y, tras haber sido intervenido por una afección cardíaca, había sido dado de alta y regresado a Windsor. [NOTICIA EN DESARROLLO]