En comunicación con Toma y Daca, el Alberto Fernández habló sobre las visitas de jueces que recibió Mauricio Macri en la quinta de Olivos cuando era presidente, de la persecución política y la mesa judicial de Cambiemos.

"Lo que pasó durante el gobierno de Cambiemos no había pasado nunca en Argentina. El poder ejecutivo utilizó a la justicia para perseguir a sus opositores", sostuvo el Presidente quien señaló que hubo muchos jueces que se prestaron a eso.

En ese sentido, el mandatario explicó que no hay delito en que un juez hable con un Presidente, pero si hay delito si el Presidente le da ordenes. "El problema es que el juez vaya a rendirle cuentas o que el Presidente le diga lo que tiene que hacer", puntualizó.

"Hay casos muy llamativos. El juez Hornos yendo a la casa de Gobierno a anunciar las medidas que iba a tomar, que luego fueron tapa de los diarios me parece gravísimo. En campaña yo expliqué que había un circuito en la Justicia penal que empezaba en los fallos de Claudio Bonadio y Julián Ercolini, seguía con Bruglia e Irurzun y terminaban con Hornos y Gemignani. Era un circuito cuidado", dijo el Presidente.

"Cuando se habla de corregir a la Justicia quiero que nadie use la Justicia para perjudicar o perseguir a nadie que no deba ser perseguido porque ha violado la ley", completó.