El Gobierno de la provincia de Buenos Aires suspendió publicó una resolución para que suspende el deber de asistencia presencial al lugar de trabajo para todo el personal de la administración pública para evitar  el incremento de casos de coronavirus. La medida establece que los trabajadores deberán prestar servicios desde sus domicilios hasta el 31 de marzo inclusive.  Quedan exceptuados del alcance de la resolución "aquellas personas trabajadoras de la administración pública provincial que hayan sido convocadas para garantizar servicios y actividades esenciales y/o no interrumpibles, siempre que su prestación, por su naturaleza, no pueda ser brindada desde el lugar de residencia".