En La Mañana, el periodista deportivo Sergio Altieri repasó el vinculo entre la dictadura militar y el fútbol y recordó cuando Rafael Videla le agradeció a los jugadores de la selección juvenil el titulo mundial obtenido en Japón 1979.

"Ustedes dieron un ejemplo de disciplina y de orden. Reconocen el principio de la autoridad", le dijo Videla a esa selección que estaba integrada por Diego Maradona.

Años después del golpe de Estado, Maradona fue consultado por ese encuentro con el genocida. "Videla es un bicho vigilante. Me mandó a cortar el pelo cuando salí campeón del mundo" recordó Maradona en una entrevista.

"Yo tenia el pelo largo y me puse gomina para que no se diera cuenta. Cuando me vio, él me dijo que lo primero que tenía que hacer era ir a la peluquería porque un soldado suyo no podía tener el pelo largo. Un vigilante y un botón", agregó el diez.

"Los militares no me cabieron, no me caben, ni me caberan jamás. Nos mataron a 30 mil", sentenció Maradona.

Maradona, la dictadura y su llegada a Boca como salida elegante

Diego Maradona era una figura relevante del fútbol nacional e internacional cuando la década del '80 daba sus primeros pasos. Barcelona y Juventus posaron los ojos en el campeón juvenil '79, pero su salida al exterior debió esperar por conveniencia de los militares y así terminó con la camiseta de Boca tras irse de Argentinos Juniors.

La coyuntura de aquel entonces era compleja, ya que en el país reinaba la dictadura cívico-militar más sangrienta de la historia, ya con Leopoldo Fortunato Galtieri a la cabeza de la Junta. Además, se venía el Mundial '82 en España y el entrenador César Luis Menotti había pedido que no le desarmaran el plantel con ventas al exterior.

Es por ello que Maradona, que llegó a amenazar con su retiro del fútbol si no se iba de Argentinos, desembarcó en Boca, en una salida decorosa para las partes: el jugador consiguió irse, el club de La Paternal obtuvo ingresos y el "xeneize" sumó una figura de renombre pese a tener las arcas prácticamente vacías.