La cofundadora de Madres de Plaza de Mayo celebra este lunes sus 91 años de edad, luego de una vida dedicada a la lucha por los derechos humanos y contra la impunidad. La ferviente militante le dedico muchos años de su vida a la lucha para recuperar hijos y nietos desaparecidos en la dictadura cívico-militar que comenzó del 24 de marzo de 1976 y fue la más sangrienta en la historia argentina. Nora Morales de Cortiñas nació el 22 de marzo de 1930 y se desempeño como psicóloga social y profesora en la facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires. El 15 de abril de 1977 los militares se llevaron a su hijo, Carlos Gustavo Cortiñas, un estudiante de Ciencias Económicas en la UBA además de militante en la Juventud Peronista. En el comienzo de la década de 1970, Carlos Cortiñas colaboraba con el Padre Carlos Mugica en la Villa 31. En 1977 fue secuestrado en la estación de tren de Castelar en la Provincia de Buenos Aires. Desde entonces, Norita lo busca de forma incansable hace más de 40 años.

Una historia de lucha

"Las Madres participamos no solo de la búsqueda de Memoria, Verdad y Justicia, si no que acompañamos las luchas por los derechos económicos, sociales, culturales y de género", reflexionó Cortiñas. Dentro de tanta tristeza que transmutó en lucha, Norita participa con la misma predisposición y empatía de otras batallas. Algunas son dentro de las escuelas secundarias sobre diversidad sexual, otras son manifestaciones a favor de los derechos y, como mujer empoderada, fue una fiel militante en la Campaña por la Interrupción Voluntaria del Embarazo a favor del Aborto legal, seguro y gratuito. Por eso, a sus 91 años, son infinitos los saludos y el amor que le mandaron a través de las redes sociales, para conmemorar otra jornada de lucha en la que tanto Ella, cómo todo el colectivo de madres y abuelas, es protagonista otro año más.