La Ministra de las Mujeres, Estela Díaz dialogó en Que vuelvan las ideas sobre cómo se manejan las problemáticas de los femicidios a través de los protocolos del estado.
La Ministra señaló que tanto el caso de Guadalupe Curual como el de Úrsula Bahillo tenía signos de alertas tempranos como denuncias o medidas de protección en los que el Estado no pudo actuar de manera eficiente.
Sin embargo subrayó que "hay un 80 porciento de casos (femicidios) en los que no hay denuncia previa".
Por esta razón, Díaz aclara que el sistema judicial no pondera como debe la matriz del tema en su totalidad, ya que a veces "actúan en piloto automático", no atendiendo de donde viene el agresor, qué antecedentes tiene o si posee armas.
La funcionaria explicó que la problemática no es compleja de abordar, aunque hay escasa inversión y un prejuicio preponderante ante las víctimas de violencia de género.
"Hay una falta de escucha realmente activa, una ponderación de esta voz. Y esas alertas son las que hay que tener absolutamente claras en relación a lo que nos están diciendo", indicó.
Al respecto de las medidas perimetrales, Díaz señaló que en ese punto "no sirven ya que estamos frente a un agresor que no tiene límites", aunque hay otras situaciones que "son más leves, que es donde empieza la situación de violencia, donde está el primer acercamiento a algún servicio y más perimetral. Es un parate".
El rol de la mujer y el machismo en la Sociedad
Por último, la Ministra recordó que las mujeres han hecho un proceso enorme en las últimas décadas. Mujeres de todos los sectores sociales y de todas las edades, en torno a qué es ser mujer en la sociedad y a cambiar los roles tradicionales.
Por esta razón hizo hincapié en que "los varones tienen mucho desconcierto y en una sociedad muy desigual".
"En una sociedad donde hay muchas violencias sociales, eso también se traduce en violencias interpersonales en un lugar donde los varones siguen teniendo un lugar de privilegio", enfatizó.
