“Fue una situación bastante difícil, hasta el día de hoy son secuelas que no se borran, nos cortaron la vida de repente”, expresó Luciana.

Denise Moruzzi, de 41 años, y Luciana Esteche, de 20, son madre e hija. Desde el año pasado están involucradas en una causa por "tráfico de estupefacientes" luego de que en su domicilio se les encontrara tres plantas de marihuana que utilizaban con fines medicinales.

Ambas estuvieron presas Penal 47 de San Martín durante siete meses y, ahora, se encuentran con prisión domiciliaria.

Denise y Luciana utilizan la marihuana para paliar sus síntomas ligados a la salud mental. “Nosotras veníamos ya de pelear mucho tiempo contra la depresión, los ataques de pánico; socializar, salir a la calle se nos complicaba mucho”, contó Denise.

“No teníamos vida hasta que fui a la CAMEDA (Cannabis Medicinal Argentina), tenía conocimiento de lo que hacía con las patologías y veíamos que aplicaba perfecto. Vi lo que es salir a la calle sin miedo, poder ir a trabajar”, sotuvo.

Además, Luciana se refirió a su situación actual y afirmó: “creo que cuando nos den la libertad va a ser muy difícil salir, todavía tenes esos miedos de ‘¿y si otra vez me patean la puerta y tengo un faso y quedo pegada otra vez? ¿Y si me regalan un aceite y me hacen un allanamiento?”, se preguntó.

"Son un montón de cuestiones que hoy en día nos planteamos y tenemos miedo, cuando antes teníamos una vida pacífica y sentíamos que teníamos un rumbo”, expresó.