Expertos del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) encontraron sin vida el cuerpo de Luis Armando Espinoza en Catamarca, desaparecido desde hace una semana.
El cuerpo fue hallado en un precipicio a 150 metros de profundidad envuelto en bolsas blancas y negras rodeadas de cintas en la montaña, con precipicios empinados, mucha niebla y vegetación tupida. El lugar está ubicado a pocos metros de Alpachiri, del lado tucumano, y del departamento de Andalgalá, en Catamarca. De las decisiones que se adopten se procederá al traslado del cuerpo de Espinoza a una u otra provincia.
“Por el tipo de hecho y el involucramiento de efectivos de la fuerza de seguridad pedí la participación exclusiva del ECIF para las inspecciones, reconocimientos, registros y trabajos de inteligencias que se hicieron para esclarecer este hecho" sostuvo la fiscal del caso Mónica García de Targa.
Espinoza había había ido a cobrar junto a su hermano Juan y pasaban a ver a un familiar cuando se encontraron con un grupo de policías que venían de reprimir a participantes de una carrera cuadrera, en presunta violación de la cuarentena. Los policías, al asumir que ambos habían participado del hecho, comenzaron a pegarle a Juan y, cuando Luis intentó frenarlos se escuchó un disparo y un golpe desmayó a Juan. Cuando despertó su hermano ya no estaba. Tanto desde el gobierno, con la intervención de la secretaría de Derechos Humanos, como desde los organismos de derechos humanos habían exigido la aparición con vida de Espinoza
Dos de los imputados, en principio por desaparición forzada y ahora por homicidio agravado, habrían quebrado el pacto de silencio entre los policías. Los efectivos Ardiles y Paz habían declarado lo que sabían y habrían admitido una participación menor en el encubrimiento. Según estas declaraciones, el cuerpo de Luis Espinoza habría sido llevado entre cuatro policías en el auto particular del subcomisario Rubén Montenegro y ocultado en la zona de Alpachiri.
